Se desconoce la prevalencia real de la endometriosis en la población general debido en parte a:

a) la normalización social del dolor
 
b) el estigma en torno a los problemas menstruales 

c) falta de conciencia de la enfermedad entre los pacientes, los proveedores de atención médica y el público.

d) los factores sociales, como el sesgo clínico de género y las desigualdades en el tratamiento del dolor según el género, han sido bien documentados y pueden contribuir a la falta de prioridad en la financiación de la investigación de la endometriosis.